La calle se ha cerrado cuando llego a mi destino.
Llamo a la puerta antes de lo que pensaba. Se abre lentamente chirriando por la
herrumbre del tiempo, pero todavía en pie, resistiendo el envite de los años y los
males de mi vida.

He aquí mi futuro que desde hace años me espera, sin rostro, con el cuerpo desmembrado.Y cuánto se parece a mí.

1 Comment

  • Anónimo Posted 7 noviembre 2012 8:30 am

    Sencillamente genial, Mercedes.

Add Comment

Verified by ExactMetrics